Resident Evil 3: Nemesis

Fíjate tú por dónde que mi Resident Evil favorito no es el 2, como podría imaginarse la gente, porque es el más completo, estéticamente el más interesante y mucho más largo.


Pues no. Me quedo con el 3. Que viene a ser un 2,5 pero que me da igual. RE3 inicia la divertida costumbre de empezar a recuperar personajes, updatearlos y ponerlos más sexies por momentos. La primera en pegar el estirón fue mi amada Jill Valentine, que se quitó la boina y el traje de su equipo Alpha (o Bravo?) de S.T.A.R.S. y se nos puso más sport, con pantaloncitos, sudadera azul y camisetita blanca. Un buen corte de pelo y, oye, lista para huir de la ciudad que más veces ha estallado en el mundo.

Pero qué pasa esta vez? Al final de RE2, un mastodonte llamado Tyrant aparecía un par de veces atormentando tu existencia. Como si no tuvieras bastante con el terror de encontrarte zombis, lickers, personajes que comparten logopeda con Belén Esteban... le sumaron la minipersecución de este monstruo.

Les gustó la idea, y la aplicaron al completo en RE3. Nemesis, un monstruo tan feo como genialmente diseñado, de 2 metros y medio de altura y sin labios (como Esther Cañadas pero al revés) te persigue. SIEMPRE. Da igual que estés en la gasolinera, en el hospital o en la redacción del periódico del pueblo. Nemesis puede acosarte en cualquier momento y, para más inri, te tocará decidir.

Inventaron un sistema de "decisiones" en el cual en un momento clave, la imagen se congelaba, se volvía en negativo y tenías que elegir un camino. Si querías atacar, o te escondías, o lo que fuera. Todo tiene sus consecuencias, y una vez jugado, te das cuenta que la solución que siempre parece la más cómoda es la que más cargarás en el futuro, así que ese componente "Tria la teva aventura" se acaba pronto.

Hay un nuevo compañero en la oficina. Se llama Carlos Oliveira, es brasileño y tiene menos carisma que el estilista de Rebecca Chambers.

El resto será más de lo mismo en el mejor de los sentidos. Por primera vez dejamos de estar encerrados en una mansión o en una comisaría para estar encerrados en las calles de Raccoon City. El formato es el mismo: muy cerrado, grande, pero muy lineal, tenemos que irnos moviendo adelante y detrás (back & forth, como Willow Smith) y recoger cosas, ponerlas aquí y allá.

Aunque sigamos encerrados, poder visitar la ciudad y sus distritos más céntricos se agradece, y consigue mantener la claustrofobia mezclada con el frescor de estar al aire libre. Pero tranquilos, al final siempre, SIEMPRE hay un laboratorio secreto de Umbrella, porque otra cosa no, pero laboratorios de Umbrella salen como setas.

En fin, RE3 cerró una etapa muy clara en la saga. O almenos significó un punto y seguido, ya que Code: Veronica, pese a ser totalmente en 3D, mantiene perfectamente el alma de la saga. RE4 & 5... es otra historia.

One thought on “Resident Evil 3: Nemesis”

  1. Creo que es uno de los mejores RE que hay. Jill va hecha un putoncillo. Podría llevar la rebeca puesta, pero ella prefiere atarsela a la cintura, como una chica de barrio. A nivel de secundarios no hay gran cosa. Eso si, una vez te pasas el juego y encuentras la llave de la tienda de ropa, todo cambia, y para bien!

    Pd: la palabra para veirificar que no soy spam ha sido... bionic!!!