Estoy a pocos capítulos de pasarme por fin Resident Evil 5. Tras mi discutiblemente lógica decisión de hacer boicot a Capcom (remakes, remakes, ports, remakes, ports y encima este RE calcado al 4), sólo pude aguantar una semana (Sí, mis boicots dejan que desear, get over it).
El caso es que, a mi parecer, tanto el argumento como el planteamiento perfila y mejora lo ya existente en la aventura que vivió Leon Kennedy en tierras españolas.
El ganado ha pasado a ser Wanjiji o algo así. Son los mismos en esencia, pero han dejado el aspecto de señor de carajillo y maruja del diario de Patricia por unos looks
más africanos.
Y bueno, la historia no puede ser más atrayente. Seguir desentrañando los orígenes de Umbrella, con una nueva corporación de por medio: Tricell, encabezado por Excella, una pérfida jefa de cosméticos italiana con predilección a enseñar las tetas y a meterle mano al malo malísimo, el eternamente rubio Albert Wesker. Otro de los ejes del juego será la supuesta muerte de Jill Vallentine... Vamos, todo muy soap opera.
Nena, cancela todo lo que tengas hoy y llama a Emma García. Tengo que elegir entre dos maromos.
Lo único que salvará el juego son las dos fotos que has puesto, Chris y Excella. Todo lo demás, a la hoguera!
¿Aún tiran de Albert Wesker? Yo vi la peli de Degeneración hace unas semanas y no pude estar más de acuerdo con el título. DE-GE-NE-RAAAAAAAAR